No te falta tiempo, te faltan hábitos
El puente entre donde estás y dónde quieres estar
El tiempo es el recurso más equitativo y, paradójicamente, uno de los más malgastados. No es que nos falte, es que lo dejamos escapar en lo irrelevante.
Séneca ya lo advirtió hace siglos: la vida no es corta, nosotros la acortamos entregándola a actividades triviales y preocupaciones vacías. El problema nunca ha sido la escasez de tiempo, es cómo lo gestionamos y hacia dónde lo dirigimos.
“Muchos esperan el futuro y malgastan el presente”, decía. Pero el presente es lo único real. Lo único que existe. Y en un mundo donde cada notificación es una invitación a distraernos, quien no controla su atención termina por regalársela a otro.
Procrastinar no es falta de tiempo, es falta de consciencia. De presencia. De dirección. Y, en esencia, de uno mismo. Si no decides qué hacer con tus horas, alguien más lo decidirá por ti. Y tu futuro pagará la factura.
El “lo haré mañana” es uno de los grandes autoengaños. Todos hemos estado ahí. No pasa nada. Es humano. Pero cada elección, por pequeña que parezca, cuenta. Cada “lo haré mañana” es un ladrillo en el muro que separa la vida que quieres de la vida que tienes.
La verdadera cuestión es: ¿qué eliges momento a momento?
El éxito y la virtud no son casualidad. Son el resultado de hábitos, de pequeñas elecciones repetidas a lo largo del tiempo. Aristóteles lo resumió así:
"Somos lo que hacemos repetidamente. La excelencia, entonces, no es un acto, sino un hábito".
Haz la prueba.
Audita tu día.
Tus hábitos te dirán quién eres, no quién crees ser.
No se nace disciplinado. Se construye la disciplina. No se es lector por deseo, se es por leer cada día.
Cada elección es un voto hacia la persona que quieres ser.
Leer en lugar de hacer scroll infinito en redes es votar por tu futuro. Entrenar en lugar de ceder al sofá es votar por tu disciplina. No son las grandes decisiones las que definen tu vida, son las pequeñas acciones que repites cuando nadie te ve.
Tu carácter se forma en lo que practicas, no en lo que deseas.
Y volvemos al principio: la verdadera cuestión no es si tienes tiempo, es cómo lo estás utilizando y hacia dónde te lleva cada elección, cada hábito, cada día.
¿Hay suerte en el éxito?
Quizás menos de lo que creemos.
Las personas felices o exitosas no llegan ahí por accidente. Lo logran porque han aprendido a elegir, una y otra vez, el hábito que les acerca a sus objetivos. Porque confían en el proceso, aunque a corto plazo no vean resultados inmediatos.
Y hablando de elecciones importantes...
Hay hábitos mentales igual de importantes que los físicos. Porque no basta con querer cambiar, también hay que aprender a pensar diferente.
Y ahí es donde entra El Nido.
Eagy se define como “un don nadie con criterio propio”. Alguien que aprendió a escapar del piloto automático y a cuestionar las creencias que lo limitaban. Cada viernes, en su newsletter, comparte ideas directas y sin filtro sobre cómo romper con la inercia mental y construir nuevas formas de pensar.
Si quieres entrenar tu mente para elegir mejor, para salir del bucle y retar tus propios límites, échale un vistazo a su newsletter. Te prometo que te hará pensar de verdad.
https://elnidoeagy.substack.com/
Lo dejamos aquí por hoy.
En próximas newsletters, profundizaremos en cómo se forman los hábitos y qué podemos hacer para que jueguen a nuestro favor.
"Primero nosotros creamos nuestros hábitos, luego nuestros hábitos nos crean a nosotros."
John Dryden
Nos leemos el próximo domingo.
Ainhoa.
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Joder que bueno Ainhoa, podría haber restackeado 4 o 5 frases la verdad.
A mí me gusta una analogia de si tuvieras 1440 euros al día los gastarías en cualquier cosa? Entonces porque lo haces con tus minutos?
Luego lo de auditar tu tiempo es un ejercicio que la mayoría no hacen por pereza pero te da una claridad mental de como lo estás perdiendo que ya nunca lo ves igual.
Que importante son los hábitos y que fácil caemos en la distracción infinita. Si no somos conscientes del ahora, pensando en el futuro. En el futuro si que nos lamentaremos de no haber sido conscientes y haber aprovechado el tiempo útil. Es cierto que en las distracciones caemos todos y cada vez en este mundo de la inmediatez y las distracciones digitales. Me freno aquí, que podría dar una chapa sobre el sistema que nos mantiene preocupado.... Buena semana Ainhoa.